2.3.09

ritos y tradiciones funerarias, ¿elaboracion de duelo?


Niña cuando yo muera
No llores junto a mi tumba
Tocame sones alegre mi vida
Cantame la sandunga…
[1]

Hablar de la muerte, es hablar de un tema con mucho misterio para todas las personas, ya que la idea de la muerte queda relegada, apartada e incluso eludida. Su presencia nos llena de miedo, dolor y sufrimiento al no saber como tratarla ni estar preparadas para sumirla con naturalidad. La manera de ver la muerte tiene que ver con la cultura que cada uno tiene, pues, dentro de èsta en michas ocasiones no es concebible hablar. La forma de concebir la propia muerte, asi como la elaboración de numerosos duelos que realizamos a lo largo de nuestra vida fomaran parte de nuestro quehacer diario, tratando de asumir dichas situaciones con una actitud psíquica saludable, lo que conlleva a una apuesta por la vida y nos proporciona, una mayor calidad de vida.

El tema del duelo siempre ha sido de gran interés personal, pues siempre, me he preguntado ¿que hay detrás de todos esos ritos, esas tradiciones que salen a flote a partir de que fallecer un ser humano?, ¿parte de una elaboración?, ¿parte de una costumbre? ¿De qué se trata?, ¿en qué consisten?
[2]
El presente escrito dara cuenta, del duelo de los padre por la muerte de sus hijos,
[3] ¿Cómo es el duelo subjetivo de los padres de los angelitos muertos? Como lo sobrelleva de acuerdo a los ritos y si èstos tienen que ver con la elaboración del duelo. Tocando los temas de rito de duelo y duelo subjetivo de los funerales de angelitos.

Muchas veces me he preguntado si los funerales son para la familia o es para la sociedad, se me puede ocurrir que son para la familia como forma de despedida de su muerto, como un escalon a la elaboración del duelo, como una etapa final de aceptación, velarlo toda una noche, aceptar la muerte, asumirla y asimilándola, aunque sabemos que aceptarlo, asumirla y asimilarla no es de una noche. Sin dejar de lado las flores, la música, la cena durante el velorio (el famoso chocolate y el pan), los gritos desgarradores
[4] suplicando que no sea cierto, que solo esta dormido, que va despertar y demás. Siempre he pensado que los ritos se convierten en compromisos a realizar si de muerte o funerales se trata, es decir que el ser que se queda tiene la obligación de llevarlo a cabo, aunque este fuera de su alcance[5] y sus deseos, porque lo social y lo cultura lo obliga.
Araceli Colin manifiesta que los ritos tienen eficacia simbolica, que su solo transito produce transformaciones subjetivas. Pero, o bien el rito ayuda a resolver el duelo subjetivo y entonces se trata de un rito de duelo que reconoce que hay sufrimiento por la perdida, o bien, la significación de la muerte es tal que no hay lugar para el duelo subjetivo.
[6]
Creo, que valdría la pena contextualizar el funeral de angelitos muertos.

El rito funerario de angelitos que comprende el velorio, la procesión, el entierro del cuerpo, el levantamiento y entierro de la sombra, presenta cremonios de distintos unas son festivas (velorio y procesión) y otras no lo son (entierro y levantamiento de la sombra). En el rito funerario es donde se produce la transformación ontológica del cadáver del niño en angelito, un ente sagrado que accede a la gloria por su inocencia, según el cristianismo. A transformación ontológica esta simbolizada por el atuendo de un santo o santa de la devoción de los padres con el cual se viste al infante. Nueve días después, si el niño tiene mas de 12 años, se levanta la sombra y si es menor a esa edad simplemente se levanta la cruz de flores y se sepulta junto al cuerpo del niño (entre los zapotecas el niños no se transforma en angel, si no en flor). Araceli Colin, no asegura que un rito d duelo resuelva el duelo sibjetivo, por muy fuerte y cohesiva que sea una tradición cultural, tampoco asegura que la significación cristiana de la fiesta por la muerte infantil tenga tal solidez en la creencia y tanto impacto en ella que produzca la inexistencia del duelo. El rito contribuye a la efectuación del duelo subjetivo pero no lo subsume ni lo anula.
[7]

Este rito me llama la atención, porque sostiene que no hay duelo, porque no se les llora, la razón es que si lloran no quieren entregar a su hijo a la virgen y èsta no lo recibe, como el pequeño fallecido se convierte en angelito, requiere una madre celestial, es por eso, que “no hay duelo” y debe haber alegría porque su hijo tendrá una mejor madre, una madre divina.
Con esta creencia de que el pequeño se convierte en angelito y se va con una madre celestial que le dara mejores cuidados, hace que la madre terrenal, sienta dicha porque el pequeño se va a la gloria y haga de cuenta que no esta muerto solo que cambio de lugar
[8], sin embargo Colin manifiesta que existe un dolor no tramitado.

Esto me hace pensar en que quizá este rito es una manera de bloquear el dolor, si, a pesar de que coincido en que los ritos y las tradiciones no elaboran el duelo, creo que se ven de otra forma, no se, pienso porque muchas personas cuando se les muere un ser querido tienen ideas de que esta en el cielo, con un Dios quizá, o bien, que esta mejor que uno que quedo vivo en la tierra, porque por fin esta descansando en paz y el dolor se enfoca mas en uno mismo, como dice Allouch, en el “trozo de si”,
[9] que se lleva èste ser querido que se va o como menciono uno de mis maestros en algunas de mis clases de la facultad, “me duele lo que vivimos, pero me duele mas lo que planeamos juntos”, esta frase me dejo pensando en que en realidad, esta es una forma de establecer o nombrar el trozo de sì, pues èste, es el trozo de uno mismo que se lleva el que se va.[10]
Colin desgloza dos hipótesis, la primera donde hay duelo y el rito pretende hacer soportable el difícil transito de la noche del velorio lo que permitiría el sacrificio de un trozo de sì en todos los padres y madres que pierden un hijo y que participen en todas las creencias comunitarias. La segunda hipótesis es que no hay duelo, puesto que la creencia de que el niño va a la gloria y la realización del rito, por el cual se efectuaría dicho transito,produciría un cambio en la significación de la muerte del hijo en razón del bautismo.
Es difícil pensar que los padres no tengan o no vivan un duelo por un hijo muerto, bueno, he escuchado que el dolor mas grande del mundo es perder un hijo, porque no hay amor mas grande que el que se les tiene a los hijos, sin embargo, bien he escuchado también, que si el dolor mas grande es perder un hijo, pues mas grande aun es que este hijo sea adolescente y la verdad no entiendo porque, supongo que por la edad misma, ya que la adolescencia es una etapa fuerte de cambios y emociones, empero, no me queda bien aclarado este punto de, porque duele mas que el hijo sea adolescente, eso me tocara investigarlo.

La mirada del niño fallecido como cadáver, pienso yo, que es lo mas desagradable, esta en la línea del pensar que esta muerto o de pensar que solo duerme. En mi cultura, como en muchas otras, por lo que he visto, la madrina viste al niño muerto y no la madre, sin embargo, yo no había entendido cual era la verdadera razón, y según mi suposición es porque la cultura misma protege a la madre de encontrarse con una verdad insoportable y dolorosa en el momento de vestir a su hijo muerto….

Las tradiciones y los ritos ayudan a soportar el duelo o verlo de otra forma, mas no desaparece el duelo, no se puede decir que no existe un duelo, porque esto esta fuera de lo real. Otro rito que he escuchado en mi cultura como en otras, es que cuando el niño fallece se le dan dentro de su ataúd sus juguetes favoritos o la ropa que mas le gustaba ponerse, esto, con el fin, de que se lleve sus objetos mas preciados.
Este es un tema muy extenso y no cabe duda que me topo con que mientras mas leo, me doy cuenta cuan ignorante soy, aparte es de interés personal, el tema del duelo es fundamental para mi. Como cierre para este escrito quisiera mencionar algo comico a este tema, como para no dejar de lado el chiste, lo festivo, la risa que señala Colin en su escrito, bueno, es que esta frase me gusto mucho cuando la escuche por primera vez y me hizo reir:
……” si volviera a esta vida, pediría algo, me gustaría ser rico, no mas pa ver que se siente…

... la flor de todos los sones
Tocame sones alegre, mi vida,
Música que no muere
No me llores no, no me llores no
Porque si lloras me muero
En cambio si tu me cantas
Yo siempre vivo, yo nunca muerto…
[11]
[1] LA MARTINIANA, son regional del Istmo de Tehuantepec, Oaxaca.
[2] Refiriéndome con exactitud, al velorio, rezos, y todas esas acciones que se llevan acabo a partir de una muerte, y las diferencias que existen de ciertas regiones.
[3] Refiriendome con mayor énfasis al rito festivo por angelitos muertos en Malinalco.
[4][4] Sobre todo la madre, porque la misma cultura reprime al hombre (el padre) a llorar, y si lo hace tiene que ser en silencio, que nadie lo mire porque debe mostrar fortaleza ante la familia y por ser cabeza de èsta.
[5] Económicamente hablando estos ritos son costosos.
[6] Colin, Araceli. Funerales de angelitos muertos. ¿rito festivo sin duelo? Litoral 34. Muerte y Duelo. Ecole lacanienne de psychanalyse.
[7] Colin, Araceli. Funerales de angelitos muertos. ¿rito festivo sin duelo? Litoral 34. Muerte y Duelo.
[8] En ese sentido la transformación del niño en ángel proporciona a los padres una posibilidad de construir un vinculo.
[9] Allouch, Jean. La erotica del duelo en tiempo de la muerte seca.
[10] Colin, Araceli. Funerales de angelitos muertos. ¿rito festivo sin duelo? Litoral 34. Muerte y Duelo.
[11] Continuación de la Martiniana.

2 comentarios:

Alfredo dijo...

Cuando me muera lo unico que pedire la banda toque son calenda, no quiero flores, no quiero lagrimas, una cerveza fria para bajar el mal rato bastaria, polvo soy polvo sere y en algun lugar tan cerca o tan lejos volveremos estar brinda. vaya mala costumbre de llorarle a los muertos.

Selene Emireth dijo...

Jajaja, Mecott pone lo mismo que en su blog.

No, pues cada lugar tiene sus tradiciones para llorar (o celebrar) a sus muertos, están muy interesantes las tradiciones que comentas, la verdad no conocía la mayoría de estas. Ojalá pudieras mencionar algo más de Oaxaca, por ejemplo como piden a las novias, porque mi abue que tambien era de alla, nos solia comentar algunas tradiciones de cómo pedian a las muchachas para casarse, pero la verdad ya mi mente me falla y si lo quisiera comentar no seria del todo verdadero...

SEJM
16/Mar/09